Gobierno prometió 47 plantas de oxígeno y éstas todavía no operan

El gobierno de Francisco Sagasti con su exministra Pilar Mazzetti prometieron en el mes de enero 47 plantas de oxígeno para poder atender a los pacientes Covid, que diariamente pasaban a un estado crítico padeciendo asfixia. Según el informe de la periodista Claudia Toro, de las 47 plantas proyectadas, El Ejecutivo prometió que 18 de estas plantas serían entregadas e instaladas en febrero. A este paso ¿Cuántos peruanos muertos quiere ver este gobierno?

Un caso muy triste, es el de Melisa Juárez que hizo todo lo posible para salvarle la vida a su madre Fidelia Contreras, que falleció dentro del Hospital de Collique en Comas. Mientras Melisa pedía ayuda, su madre agonizaba por falta de oxígeno; ella acababa de conseguir una cama para doña Fidelia, pues la mantuvo con vida más de 20 días en su propia casa, una propiedad que tuvo que hipotecar por 20 mil soles para salvar la vida de su madre. Melisa gastaba más de 5 mil soles para comprar 3 balones de oxígeno diarios: “En oxígeno y en medicamentos, casi 60 mil soles; es preferible invertir en las vacunas, que estar pasando todas estas situaciones, porque inclusive nosotros hemos dado el título de propiedad para poder conseguir un préstamo”.

Lamentablemente, 24 horas después, su madre murió víctima de un paro respiratorio; doña Fidelia no resistió y murió asfixiada. Melisa denunció que en el hospital nunca le colocaron oxígeno y la dejaron morir, pues el medico a cargo, le dijo que —su madre les quitaba oxígeno a otros pacientes—: “Talvez mi mamá hubiera durado más días, pero en 24 horas… no es posible que la lleve al hospital y que en 24 horas ya esté muerta… la amo y la extraño mucho. Que me perdone si la llevé, fue un error, yo quería todo lo mejor para ella”.

En estos momentos el escenario es macabro y durante la segunda ola, solo entre enero y marzo han fallecido 10,237 peruanos a falta de camas UCI, sin vacunas y sin oxígeno que les permita sobrevivir. La demanda de oxígeno actualmente en nuestro país es de 450 toneladas diarias, pero nuestro déficit sigue sin levantarse.  

Es inexplicable, la inercia del Ministerio de Salud que actualmente está capitaneado en ese orden, por Ugarte-Bermúdez-Sagasti.

Por su parte el constitucionalista Natale Amprimo afirma: “Cómo es posible que en un país que requiere oxígeno, la empresa privada le quiere donar una planta de oxígeno, y simplemente la reacción del gobierno es no; porque le dicen, hemos hecho un proyecto con la UNI. Nos van a construir 47 plantas, pero al día de hoy no tenemos ninguna”.

Asimismo, a la exministra de Salud Pilar Mazzetti parece que se la tragó la tierra; sin embargo, deberá pagar por toda su indolencia y por el desprecio que mostró hacia los peruanos, al dejarlos morir sin consuelo. Mazzetti se vacunó fraudulentamente en la comodidad de su casa y cuando aún era ministra de Salud, el 20 de enero pasado anunció que la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) fabricaría 47 plantas de oxigeno medicinal. 30 serían instaladas en hospitales y 17 serían movibles. Por esa inversión que tenía carácter de urgencia, el Estado pagó 114 millones de soles.

El compromiso del gobierno, conjuntamente con la UNI, era entregar en febrero por lo menos 18 plantas, pero eso nunca pasó; es decir, ha transcurrido casi un mes y el mandato de Francisco Sagasti no ha cumplido. La gente se sigue muriendo por falta de oxígeno y muchas familias siguen hipotecando sus propiedades y vendiendo sus vehículos para adquirir el insumo medicinal, porque las mafias especuladoras lo venden a miles de soles.

El congresista Diethel Columbus dice: “Como consecuencia de no entregar las plantas, han muerto compatriotas por falta de oxígeno. Si esas plantas se hubiesen entregado dentro de los plazos que se acordaron, cuántos compatriotas hubiesen podido conectarse al oxígeno y no lo han hecho”.

¿Quiénes son los responsables de este fracaso que provocó miles de muertes?

El contrato entre la Universidad Nacional de Ingeniería UNI y el Ministerio de Salud fue firmado el 30 de octubre del año pasado, cuando Martín Vizcarra aún era presidente.

 En representación del Ministerio de Salud firmó Pilar Mazzetti, por la UNI firmó el rector Jorge Elías Alva Hurtado, investigado por la Fiscalía por contratar con el Estado mientras su hija María Antonieta Alva era ministra de Economía, incluso, ella aún era ministra cuando se firmó este contrato.

Así todo quedaba en familia; pero también se suma otra responsable de esta inacción que sigue matando a peruanos, se trata de la amiga cercana de Martín Vizcarra. Ella es la otra responsable y protagonista de este fracaso: Elizabeth Milagros Chahuares Arpasi, una moqueguana de 34 años que fue nombrada jefe del millonario proyecto “Oxigena 47”, ella se presentó ante todos como ingeniera mecatrónica, una falsa experta que decía ser asesora presidencial y que solo tiene una empresa de reciclaje.

Lo cierto, es que luego de evidenciarse que esta moqueguana era una impostora, ha desaparecido. Ella se reunió en privado, dos veces con Vizcarra en Palacio de Gobierno; sin embargo, ahora él asegura que no la conoce, lo mismo decía de Richard Swing y Antonio Camayo.

Martín Vizcarra también dice que tampoco sabe nada de la carta enviada por la manager Li Weihua quien le mandó las vacunas chinas, cuando él era presidente, para que él y su familia se inmunizaran en secreto, con la condición que se firme el acuerdo entre el laboratorio chino y el Ministerio de Salud del Perú. A todas luces, hoy sabemos que todo fue un soborno.  

Ante tanta evidencia, ya no saben qué hacer y con respecto a las plantas, ahora el ministro de Salud Óscar Ugarte dice que, de acuerdo al convenio, les darán un plazo que el propio convenio establece que es entre 5 y 8 días, y asegura que el Minsa les ha dado 5 días para que entreguen las 13 plantas restantes, y si no lo hacen, reincidirán el contrato.

Por su parte Francisco Sagasti en declaraciones dijo: “Yo creo que fue una mala decisión… fue una apuesta que se hizo por la industria nacional y por la empresa nacional y evidentemente no salió correctamente”.

Miles de peruanos mueren diariamente, pero el gobierno recién se percata que la UNI no había entregado las primeras 18 plantas de oxígeno, una incapacidad que continúa causando la muerte. La organización Respira Perú ha logrado instalar 13 plantas a nivel nacional y salvar miles de vidas, ¿cómo es posible que el gobierno no sea capaz de imitar este logro de la empresa privada? cada día mueren alrededor de 250 peruanos, ¿Cuántos miles más deben morir para que este gobierno reaccione?  

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