
La tragedia golpea a la comunidad peruana en España. Cristhian Junior Obando Feria, de 28 años, fue identificado como una de las dos víctimas mortales de la explosión ocurrida el sábado 13 de septiembre en un local del barrio de Puente de Vallecas, en Madrid. El joven, padre de una niña, había emigrado hace poco más de un año en busca de un futuro mejor.
El estallido —que, según las primeras investigaciones, habría sido provocado por una acumulación de gas— redujo a escombros parte de un edificio de tres plantas y dejó más de 25 heridos, dos de ellos en estado grave. El cuerpo de Cristhian fue hallado recién el lunes 15 de septiembre entre los restos del local, tras una intensa búsqueda que se activó luego de que sus familiares denunciaran su desaparición.
Obando Feria era natural de Chulucanas (Piura), pero pasó gran parte de su vida en la zona de Zapallal, en Lima. Sus seres queridos lo describen como un joven trabajador y dedicado a su familia. Su prima hermana fue quien reconoció el cuerpo en la morgue de Madrid, en medio de escenas de profundo dolor.
Hoy, la familia del compatriota solicita apoyo para costear la repatriación del cuerpo, un proceso que implica gastos elevados. Amigos y allegados han iniciado cadenas solidarias y campañas de recolección de fondos para que Cristhian pueda regresar a su tierra natal y recibir cristiana sepultura.
Las autoridades españolas continúan investigando las causas de la explosión para determinar si hubo negligencia en el manejo de las instalaciones de gas del local. Vecinos de Puente de Vallecas, aún conmocionados, participaron en una vigilia improvisada en honor a las víctimas, Esperemos que la Cancillería se pronuncie sobre el caso.