La Fiscalía ha solicitado cadenas perpetuas para los integrantes de la organización criminal “La Nueva Jauría del Norte”, responsables de extorsión, sicariato, secuestro agravado, tráfico ilícito de drogas agravado, tenencia ilegal de armas de fuego y usurpación agravada.
El fiscal a cargo del caso explicó que los miembros de esta banda operaban con armas de fuego y sembraron el terror en negocios, empresas y obras de construcción. Según la acusación, Ventanilla fue su territorio principal, donde extorsionaron trabajadores de construcción civil y empresarios, acabando con la vida de 25 personas.
«Esta organización se caracterizó por su violencia al actuar, secuestrando y torturando a todo aquel que se opusiera a sus intereses», señaló el fiscal, describiendo un patrón de ferocidad y brutalidad que mantuvo a la población en constante miedo.
Entre los cabecillas figuran Omar Castañeda y Juan Julca, junto a otros 15 acusados para quienes se ha solicitado un total de 54 cadenas perpetuas. Otro grupo de 7 personas afrontaría penas de hasta 35 años de prisión por su participación en las actividades criminales de la banda.
Actualmente, los acusados se encuentran recluidos en centros penitenciarios de máxima seguridad, como Challapalca y Piedras Gordas. El Ministerio Público calificó a la organización como un grupo que imponía sus objetivos criminales “a sangre y fuego, con especial ferocidad”, dejando una estela de violencia en el norte del país.
La sociedad espera que la justicia actúe con firmeza, poniendo fin al reinado de terror que durante años azotó a trabajadores y empresarios de Ventanilla.
